¿Alguna vez te has preguntado cómo vivían nuestros antepasados más lejanos? Imagínate despertar cada mañana sin electricidad, sin supermercados, sin internet y con la única misión de sobrevivir un día más.
Durante este extenso período, nuestros ancestros desarrollaron las primeras herramientas de piedra, dominaron el fuego y comenzaron a crear comunidades que sentarían las bases de nuestra civilización actual. La edad piedra antigua es sin duda el periodo más antiguo de la prehistoria humana, donde las herramientas de piedra fueron fundamentales para la supervivencia.
¿Qué es la Edad de Piedra?
La Edad de Piedra entre los periodos es la más antigua y extenso de la prehistoria, abarcando así aproximadamente 2.5 millones de años atrás hasta el 3.000 a.C. Este vasto período recibe su nombre porque durante esta época antigua, los seres humanos crearon técnicas y fabricaron sus herramientas y piezas principalmente con rocas.
La Edad de Piedra no comenzó ni terminó al mismo tiempo en todas las regiones del mundo
La Edad de Piedra representa así, más del 99% de la historia humana, un dato que nos hace reflexionar sobre lo reciente que es nuestra civilización actual en comparación con el largo camino que ha recorrido nuestra especie. La técnica, los yacimientos, las piezas de la edad de piedra, los restos de hogares, las pinturas rupestres y otros vestigios arqueológicos nos permiten reconstruir cómo era la vida en aquellos tiempos remotos.
Etapas de la Edad de Piedra y sus características
La Edad de Piedra se divide tradicionalmente en tres grandes etapas:
El Paleolítico
Edad de Piedra Antigua
El Mesolítico
Edad de Piedra Media
El Neolítico
Edad de Piedra Nueva
Cada una de estas etapas representa un avance significativo en la evolución cultural y tecnológica de los seres humanos.
Paleolítico (2.5 millones de años - 10.000 a.C.)

El Paleolítico es el periodo más extenso de la Edad de Piedra y se caracterizó así por el uso de la técnica de piedra tallada. Durante esta etapa antigua, los humanos vivían como cazadores-recolectores nómadas, desplazándose constantemente en busca de alimentos y refugio. Los grupos eran pequeños, generalmente formados por 20 a 30 individuos emparentados entre sí. La dieta consistía principalmente en frutos silvestres, raíces, insectos y la carne obtenida de la caza. El periodo paleolitico edad de piedra es tambien conocido en inglés como stone age.
Lo que permitió a nuestros antepasados cocinar alimentos, calentarse, ahuyentar a los depredadores y extender sus actividades durante la noche.
como las encontradas en las cuevas de Altamira en España o Lascaux en Francia, que constituyen las imágenes de la edad de piedra más antiguas y las primeras manifestaciones artísticas de la humanidad.
Los homo sapiens dejaron estas obras como testimonio de su capacidad creativa.
Mesolítico (10.000 a.C. - 8.000 a.C.)

El Mesolítico representa una etapa de transición entre el modo de vida nómada del Paleolítico y el sedentarismo que caracterizaría al Neolítico. Durante este periodo, ocurrió el fin de la última glaciación, lo que provocó importantes cambios climáticos y en la flora y fauna. Los humanos tuvieron que adaptarse a estas nuevas condiciones, desarrollando su técnica más sofisticadas para elaborar herramientas como el arco y la flecha, arpones y anzuelos para la pesca con rocas. La edad de piedra mesolitico fue una época de grandes transformaciones.
En esta etapa, comenzaron a formarse asentamientos semipermanentes cerca de ríos, lagos y costas, donde los recursos eran más abundantes. La recolección de rocas, moluscos, la pesca y la caza de animales más pequeños ganaron importancia frente a la caza de grandes mamíferos que caracterizó al Paleolítico.
Especialmente el perro, que acompañaría al ser humano en sus actividades de caza.
Los yacimientos de este periodo muestran cómo las herramientas edad de piedra se fueron perfeccionando, tambien empezaron a usar más piedras preciosas con fines ornamentales.
Neolítico (8.000 a.C. - 3.000 a.C.)

El periodo neolítico marca una revolución en la historia humana con el desarrollo de la agricultura y la ganadería. Esta transición, conocida como "Revolución Neolítica", comenzó en el Oriente Próximo (actual Oriente Medio) y se extendió gradualmente por Europa, Asia, África y, finalmente, América. Con la agricultura, los humanos pudieron producir sus propios alimentos, lo que permitió la aparición de comunidades sedentarias y el crecimiento de la población.
Durante el Neolítico, surgieron las primeras aldeas permanentes, como Çatalhöyük en la actual Turquía o Jericó en Palestina según sus yacimientos.
También apareció la cerámica, utilizada para almacenar alimentos y líquidos, y se comenzaron a tejer fibras vegetales y animales para confeccionar ropa y otros objetos.
Este periodo fue sin duda el más antigua etapa de asentamientos humanos organizados, donde las herramientas piedra alcanzaron su máxima sofisticación. El final del Neolítico coincide con el descubrimiento de la metalurgia y da paso a la Edad de los Metales, primero con el cobre, luego el bronce y finalmente el hierro.
Herramientas de la Edad de Piedra: cómo sobrevivían nuestros antepasados

Las herramientas de la Edad de Piedra evolucionaron considerablemente a lo largo de este extenso periodo, reflejando el ingenio y la capacidad de adaptación de nuestros antepasados. Estas herramientas piedra no solo les permitieron sobrevivir en entornos hostiles, sino también desarrollar técnicas cada vez más sofisticadas que sentarían las bases para avances tecnológicos posteriores. Si nos preguntamos qué es la edad de piedra, debemos entender que fue una época definida principalmente por el uso de estos instrumentos líticos.
Herramientas del Paleolítico
Durante el Paleolítico, la producción de herramientas se fabricaban principalmente mediante la talla de piedras y rocas como el sílex, el cuarzo o la obsidiana, materiales que al fracturarse producen bordes afilados. Entre las herramientas piedra más características de este periodo encontramos:
Cantos tallados:
Son las herramientas más antiguas, consistentes en piedras a las que se les ha extraído algunas lascas para crear un filo rudimentario.
Bifaces:
Producción de rocas talladas por ambas caras, con forma de almendra, que servían como instrumentos multiusos para cortar, raspar o perforar.
Puntas de lanza:
Utilizadas para la caza de grandes animales, estas herramientas representaron un avance significativo en las técnicas de obtención de alimentos.
Raspadores y buriles:
Empleados para trabajar pieles, madera y hueso, permitiendo la fabricación de vestimentas y otras herramientas compuestas.
Estas herramientas de la edad de piedra eran fabricadas por homo sapiens y otras especies de humanos primitivos como el homo neanderthalensis.
También se utilizaban materiales orgánicos como huesos, astas, marfil y madera, aunque estos se han conservado en menor medida debido a su naturaleza perecedera. Las agujas de hueso, por ejemplo, evidencian la confección de prendas de vestir mediante el cosido de pieles.
Herramientas del Mesolítico
En el Mesolítico, las herramientas se volvieron más especializadas y de menor tamaño (microlitos), adaptándose a las nuevas necesidades de caza y recolección:
Arcos y flechas:
Revolucionaron las técnicas de caza, permitiendo abatir presas a distancia con mayor precisión.
Arpones y anzuelos:
Facilitaron la pesca, un recurso que ganó importancia durante este periodo.
Hachas pulimentadas:
Con un proceso de producción más complejo que incluía el pulido de la piedra, resultaban más eficientes para la tala de árboles.
El periodo mesolitico representa una fase de transición entre las grandes herramientas piedra del paleolitico y las más refinadas del neolítico.
Herramientas del Neolítico
El Neolítico trajo consigo nuevas necesidades relacionadas con la agricultura, la ganadería y la vida sedentaria, lo que se reflejó en el desarrollo de herramientas específicas:
Hoces:
Con hojas de sílex incrustadas en mangos de madera, se utilizaban para cosechar cereales.
Molinos de mano:
Compuestos por dos piedras, permitían moler los granos para obtener harina.
Azadas y arados primitivos:
Empleados para trabajar la tierra en las actividades agrícolas.
Cerámica:
Aunque no es una herramienta en sentido estricto, la construcción de recipientes de cerámica supuso un avance fundamental para almacenar, cocinar y transportar alimentos y líquidos.
La construcción de las piezas de cerámica fue una innovación crucial que caracterizó al periodo neolítico y marcó el inicio de nuevas formas de vida y organización social en la edad piedra.
El dominio de estas técnicas y la construcción de estas piezas permitieron a nuestros antepasados no solo sobrevivir sino también comenzar a transformar su entorno, sentando las bases para el desarrollo de civilizaciones más complejas.
La Edad de Piedra: el comienzo del ser humano como especie
La Edad de Piedra no solo representa un periodo histórico definido por el uso de ciertos materiales; también marca el proceso evolutivo que dio origen a nuestra especie y sentó las bases de nuestra humanidad.
Por otro lado, el desarrollo de El arte del Paleolítico y del Neolítico nos muestra la evolución de la expresión simbólica y estética del ser humano en la prehistoria. Las figuras de Venus paleolíticas, las pinturas rupestres y, posteriormente, las decoraciones en cerámica neolítica, representan no solo un avance en la técnica sino también la capacidad humana para la abstracción, la espiritualidad y la apreciación estética
¿Por qué es importante conocer la Edad de Piedra hoy en día?
En nuestra era digital, donde la tecnología avanza a un ritmo vertiginoso y las redes sociales dominan nuestra comunicación, ¿qué relevancia puede tener un periodo tan remoto como la Edad de Piedra? La respuesta es sorprendentemente amplia y significativa para nuestra comprensión del mundo actual y de nosotros mismos.
En primer lugar, estudiar la Edad de Piedra y sus yacimientos nos ayuda a comprender nuestra biología y comportamiento actuales. Durante millones de años, nuestros cuerpos y mentes evolucionaron en entornos muy diferentes a los actuales, adaptándose a una vida de cazadores-recolectores. Muchos aspectos de nuestra fisiología, desde nuestras preferencias alimentarias hasta nuestros ciclos de sueño, siguen estando influenciados por esta herencia evolutiva. De igual manera, explorar cursos de orientacion vocacional puede ayudarte a definir un camino profesional acorde a tus habilidades.