Julio Cortázar fue un escritor y profesor argentino muy conocido por su legado en la literatura, que incluye cuentos, novelas, relaciones epistolares con sus amigos y un trabajo de traducción impecable.
Considerado uno de los autores más originales de su tiempo, Cortázar rápidamente se convirtió en un maestro de los relatos cortos. Fue con Rayuela, su segunda novela, que se consagró en el mundo literario.
En este artículo te explicaremos por qué su obra sigue siendo tan relevante en las clases de español, así como ciertos detalles significativos de su vida y un breve análisis de Rayuela, que podrá sembrar tu interés a lo largo de tu curso de español en una lectura que no será igual a las anteriores, que será diferente cada vez que abras el libro.
¿Quién fue Julio Cortázar?
Julio Florencio Cortázar nace el 26 de agosto de 1914 en Ixelles, Bélgica, y vive hasta los cuatros años en otros países como Suiza y España. Fueron los integrantes de su familia quienes en 1918 deciden volver a Argentina.
Su padre Julio José Cortázar, funcionario de la embajada de Argentina en Bélgica, unos años después de haber regresado a la Gran Buenos Aires —Cortázar apenas tenía 6 años— decide abandonarlos.
Cocó, como le decían sus padres, creció rodeado de mujeres, principalmente en compañía de su madre María Herminia Descotte, de una tía y de Ofelia, su única hermana.
Dicen las biografías sobre Julio Cortázar que fue un niño muy enfermizo, quien la mayor parte del tiempo estaba en su cama leyendo. A la edad de 9 años ya había leído a escritores como Julio Verne, Victor Hugo y Edgar Allan Poe, que avivaron el mundo de sus pesadillas e inauguraron en él un deseo por escribir sus primeros cuentos y sonetos.
Estudió en la Universidad de Buenos Aires y se graduó en 1935 como profesor y traductor. Pese a su excelente trayectoria como docente de literatura y especialista en la traducción de textos, Julio Cortázar publica su primer libro de cuentos, Bestiario, marcando así el comienzo de su carrera como escritor.
"Mi obra personal fue hecha en la soledad, en la pobreza, sin el menor apoyo editorial. (...) Cuando los editores se despertaron a mis libros, a los de Fuentes, a los de García Márquez, a los de Vargas Llosa, se despertaron porque las primeras precarias y difíciles ediciones habían sido bruscamente leídas por un montón de gente que se las pasó de mano en mano".
El legado de Julio Cortázar
La obra de Cortázar se destaca por su experimentación con la estructura narrativa, el uso de elementos surrealistas —que colindan y definieron el realismo mágico— y una calidad atípica en las costuras de sus historias.
Bruja, su primer cuento, fue publicado en la revista Correo Literario, que aparece también en un volúmen de cuentos editado póstumamente bajo el título: La otra orilla. Fue Jorge Luis Borges quien, en la dirección de la revista Los Anales de Buenos Aires, tiene a cargo la edición y publicación del cuento Casa tomada. Es en esa misma revista donde Cortázar ve una de las primeras ediciones impresas de su cuento Bestiario.
En 1949 Julio Cortázar escribe Los reyes, un poema dramático que pasa desapercibido y es ignorado por la crítica. Luego, durante el verano de ese año, finaliza el manuscrito de su primera novela, Divertimento —la edición de este libro sucede en 1986—.
La Universidad de Puerto Rico le hace la oferta de traducir la obra completa, en prosa, de Edgar Allan Poe.
De alguna manera esta primera novela es el antecedente de Rayuela, escrita en 1963, con la que pasa a ser uno de los cuatro pilares del boom latinoamericano. Esta ficción, que transita de lo real a lo fantástico, constituye una de las obras centrales de la literatura en español de la mitad del siglo XX.
A lo largo de su carrera Cortázar recibió numerosos reconocimientos y premios, incluyendo:
- Por su contribución a la literatura universal: Premio Formentor de las letras, en 1963, y Legión de Honor Francesa, en 1983.
- Por su novela Libro de Manuel: Premio Médicis Ètrager, en 1974.
- Galardonado post mortem con el máximo premio literario en lengua español: Premio Cervantes, en 1984.
Rayuela
Escrita en París y publicada por primera vez el 28 de junio de 1963, en esta novela se narra la historia de Horacio Oliveira y su relación con la Maga.
El amor, la muerte, los celos y el arte son algunos de los temas que se abordan en este vasto universo de personajes que tiene lugar en París, donde el protagonista deambula por los puentes de la ciudad en busca de su amante, Lucía, una uruguaya que más adelante reconocemos con el seudónimo de la Maga.
Primera parte: «Del lado de allá»
Cortázar implementa una estructura narrativa fragmentada, no lineal, para presentarnos la relación apasionada y asimétrica entre Horacio Oliveira y la Maga, una mujer con un temperamento fuerte, a quien la acecha el deseo de ser amada por este hombre, más análitico y frío, quien parece no tener interés en involucrarse emocionalmente con ella.
Este tramo está cargado de reflexiones filosóficas, de una exploración lingüística con la que el escritor argentino logra volcarnos en ese tono introspectivo y melancólico de la narración.
No es gratuito que el protagonista sea un hombre con una educación privilegiada, en la búsqueda constante de discusiones intelectuales que le permitan continuar avivando la pregunta por el sentido y el significado de la vida, del mundo —uno de los temas estructurales de la novela—.
Oliveira y la Maga a menudo se reúnen con sus amigos en común, con los miembros de un grupo que ellos han decido llamar Club de la Serpiente, un colectivo de artistas, escritores y músicos que discuten acerca del arte, la literatura, la filosofía y la arquitectura.
En una de esas discusiones se debate la necesidad de romper con las formas lingüísticas del momento, que, en últimas, es la misma escritura presente Rayuela.
Segunda parte: «Del lado de acá»
El retorno de Oliveira a Buenos Aires se presenta a través de una narrativa que opta por un tono más convencional en contraste con la primera parte del libro.
Oliveira trabaja como vendedor de telas y recupera la relación con uno de sus amigos de infancia, Manolo Traveler, quien no se siente muy a gusto por su regreso y, aún así, le ofrece una vacante en el circo donde él y su esposa Talita trabajan.
Esta serie de escenas las podemos seguir sin ningún tipo de dificultad gracias a que Cortázar evita la estructura fragmenta y experimental del principio.

Oliveira, Traveler y Talita cambian de trabajo, se van a un escalofriante y oscuro hospital psiquiátrico donde los dos hombres trabajan como guardias durante la noche. Es allí el lugar donde Oliveira se obsesiva con el parecido que tiene Talita a la Maga —incluso cree verla jugar a la rayuela, que es la forma de ir al cielo, según la intuición del protagonista—.
Tercera parte: «De ambos lados»
En la última parte del libro volvemos al carácter experimental y fragmentado de la narración, presentado en los capítulos prescindibles.
Con el fin de explorar, comprender y describir mucho mejor la personalidad y los aspectos de la vida de Oliveira, estos capítulos muestran una variedad de tonos y estilos en las que se incluyen recortes de periódico y citas de libros.
Así, tenemos la oportunidad de leer la rareza con la que fueron utilizados elementos surrealistas y oníricos que subrayan la desorientación del protagonista.
Al mismo tiempo en el que profundizamos en las motivaciones interiores de Oliveira —en sus reflexiones filosóficas, en sus relaciones íntimas con los demás personajes—, se revelan ante nosotros las intenciones de Julio Cortázar por escribir una novela que involucra de manera activa a sus lectores, que los transforma en sus cómplices.
Rayuela es la novela con la que el escritor argentino logró instaurar una nueva forma de hacer literatura en español, tan trascendental, que muchas personas alrededor del mundo se animan a tomar un curso de español para extranjeros para aprender nuestro idioma. Con ella, nosotros, sus lectores, somos invitados a decidir de qué manera terminar la historia, a elegir el final.
Si estás por empezar este libro deberías tener en consideración las siguientes claves de lectura:
- Estructura narrativa: La novela se presenta como una serie no lineal de capítulos que pueden reorganizarse constantemente. La libertad que tienen los lectores de escoger el camino de su lectura es paralela a la búsqueda propia del protagonista.
- Realismo mágico: Cortázar mezcla su escritura con un registro extraño, de otro lugar, que le permite construir escenarios enigmáticos. De esta mixtura de imágenes y diálogos está hecho el deseo de Oliveira por comprender las dimensiones de la vida.
- La búsqueda por el sentido de las cosas: Oliveira se siente desorientado, perdido en el mundo. Vive entre París y Buenos Aires, y aún así no encuentra todavía el sentido de pertenencia. La novela ilustra con maestría las complejidades de la soledad, del ser humano.
- Reflexiones filosóficas y experimentación lingüística: A través del Club de la Serpiente, Julio Cortázar introduce discusiones indispensables acerca de las artes, el tiempo y la existencia. Rayuela bien podría ser un juego en el que cada paso hacia el cielo implica un tipo de escritura diferente del anterior.
- Apertura a la interpretación libre: La ambigüedad es una de las características principales de Rayuela. Con un total de 155 capítulos, la novela puede leerse de varias maneras: 1) La lectura normal, de principio a fin. 2) La propuesta por el autor, desde el capítulo 1 hasta el 56 —prescindiendo del resto—. 3) Según el criterio y las elección del lector. 4) O, finalmente, siguiendo las instrucciones del trabajo de dirección, que aparece en la primera página del libro.