Los ejercicios tibetanos, también conocidos como los cinco ritos tibetanos o 5 rituales tibetanos, son una práctica ancestral que combina movimiento, respiración y concentración. A lo largo del tiempo, estos ejercicios se han ganado el apodo de “el secreto de la juventud”, gracias a los múltiples beneficios que aportan al cuerpo y a la mente.
Pero ¿cuáles son los beneficios de los cinco tibetanos? ¿De qué manera forman parte de la práctica del curso de yoga online? ¡Te damos algunas respuestas en este artículo!
El origen de los cinco ritos tibetanos

Se dice que los 5 ritos tibetanos surgieron hace más de 2.500 años en los monasterios del Tíbet, donde los monjes los practicaban como parte de su disciplina espiritual y física. Su objetivo era mantener el cuerpo fuerte, la mente serena y la energía vital en equilibrio.
Durante el siglo XX, estos movimientos llegaron a Occidente a través de relatos y adaptaciones modernas. Desde entonces, los 5 tibetanos ejercicios se han convertido en una práctica universal que une elementos del yoga, la meditación y el entrenamiento físico.
Los ejercicios tibetanos también se conocen como 'Los cinco ritos de la eterna juventud', por su fama de mejorar la vitalidad, la postura y la claridad mental cuando se practican de forma constante.
Los maestros tibetanos consideraban que estos movimientos eran una forma de “limpiar” el cuerpo energético y preparar la mente para la meditación. Por eso, más allá del ejercicio físico, los 5 ritos tibetanos se practicaban al amanecer, cuando el silencio y la respiración eran parte del ritual espiritual diario.
Los 5 ritos tibetanos paso a paso
A continuación, te explicamos cómo realizar los 5 ejercicios tibetanos correctamente. Cada rito tiene una función específica y actúa sobre distintas áreas del cuerpo y la energía.
Es esencial lograr hacer estas 5 posturas seguidas y en este orden. ¿Por qué? Porque garantiza el efecto cíclico y regenerativo de las posturas a nivel respiratorio, emocional e interno. Son interesantes unas clases de yoga en Cali para conocer más.
Rito 1: el giro energético
De pie, con los brazos extendidos en cruz, gira lentamente sobre tu eje hacia la derecha. Este movimiento estimula el equilibrio, la coordinación y la activación energética del cuerpo.
Este rito busca “encender” el flujo de energía interna, similar a una meditación en movimiento.

Empieza con 3 giros e incrementa progresivamente hasta 21.
Rito 2: la elevación supina
Acuéstate boca arriba, con los brazos a los costados. Inhala mientras levantas simultáneamente la cabeza y las piernas rectas, exhala al descender lentamente.
Este ejercicio fortalece el abdomen, el cuello y los músculos de la espalda baja.

Si eres principiante, empieza con 3 repeticiones y ve aumentando poco a poco.
Rito 3: la extensión del camello
Arrodíllate con las manos sobre los muslos. Inhala y lleva el pecho hacia adelante, arqueando suavemente la espalda y mirando hacia arriba. Exhala al regresar a la posición inicial.
Este rito abre el pecho, mejora la postura y estimula la respiración profunda.

El tercer rito tibetano está asociado con el chakra del corazón, por lo que se considera un ejercicio de apertura emocional.
Rito 4: la tabla invertida
Siéntate con las piernas extendidas y las manos apoyadas junto a las caderas. Inhala mientras elevas el cuerpo hasta formar una línea recta entre hombros, caderas y pies. Exhala al bajar.
Fortalece brazos, abdomen y glúteos, además de mejorar la estabilidad del core.

Si resulta exigente al principio, puedes flexionar las rodillas.
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Rito 5: el flujo entre perro arriba y perro abajo
Desde una posición de plancha, inhala y estira el cuerpo hacia arriba (perro mirando arriba), luego exhala y eleva las caderas formando una “V” invertida (perro mirando abajo).
Este rito mejora la flexibilidad, fortalece la espalda y revitaliza todo el sistema nervioso.

El quinto rito tibetano es considerado el más completo, porque combina fuerza, estiramiento y respiración consciente.
Cómo practicar los ejercicios tibetanos correctamente
La clave de los cinco ritos tibetanos es la constancia. La tradición recomienda realizar 21 repeticiones de cada rito cada día, pero puedes comenzar con 3 o 5 repeticiones por ejercicio e ir aumentando gradualmente.
Aunque su aspecto es simple, la clave está en mantener la respiración consciente y el enfoque mental. Muchos practicantes recomiendan visualizar cómo la energía fluye a través del cuerpo durante cada rito. Esta conexión entre movimiento y mente convierte a los 5 rituales tibetanos en una práctica de equilibrio integral que potencia tanto la fuerza física como la serenidad interior.
Anímate a ver tutoriales en YouTube para empezar a practicar los ritos. Pero atención, si nunca han practicado con clases de yoga en Medellín, no es nada recomendable, ya que podrías hacer las posturas de forma incorrecta y lastimarte.
Recomendaciones básicas:
- Practícalos en ayunas o con el estómago ligero.
- Hazlos por la mañana para activar tu energía.
- Mantén una respiración fluida: inhala al expandirte, exhala al volver.
- Busca un espacio tranquilo, con buena ventilación y una superficie cómoda.
No se trata de velocidad ni fuerza, sino de armonía entre movimiento, respiración y enfoque mental.
Beneficios de los 5 tibetanos
Además de los beneficios físicos y mentales, los ejercicios tibetanos pueden convertirse en una poderosa herramienta de autoconocimiento. La repetición rítmica de los movimientos y la respiración profunda invitan a entrar en un estado meditativo que ayuda a reducir pensamientos dispersos y a conectar con el momento presente. Con el tiempo, esta práctica fomenta una sensación de armonía y gratitud cotidiana.
Beneficios físicos
- Aumentan la flexibilidad y la coordinación.
- Mejoran la circulación y la fuerza muscular.
- Corrigen la postura y alivian tensiones.
Beneficios mentales y energéticos
- Reducen el estrés y la ansiedad.
- Incrementan la concentración y la claridad mental.
- Favorecen la sensación de vitalidad y bienestar.
Quienes practican los 5 tibetanos a diario aseguran sentirse más ligeros, enfocados y con mayor equilibrio emocional.
¿Te gustaría conocer más de los beneficios de los cinco tibetanos?
Opiniones sobre los 5 tibetanos
Las opiniones de los 5 ritos tibetanos suelen coincidir en que es una práctica sencilla pero transformadora. Personas de distintas edades destacan su capacidad para mejorar la energía, la flexibilidad y el ánimo.

Entre los practicantes más experimentados, se considera una rutina que combina lo mejor del yoga, la respiración consciente y el movimiento energético. No es necesario ser flexible ni tener experiencia previa: lo importante es comenzar y escuchar al cuerpo.
Echa un ojo también a nuestro artículo detallado sobre las posturas de los cinco tibetanos.
Cómo integrar los 5 tibetanos a tu rutina
Si quieres incorporar estos ejercicios tibetanos en tu día a día, sigue este plan progresivo:
- Semana 1: 3 repeticiones por rito.
- Semana 2: aumenta a 5 repeticiones.
- Semana 3: sube a 7 u 8 repeticiones.
- Semana 4: alcanza las 10 o 12 repeticiones.
- A partir de la semana 5: continúa aumentando hasta llegar a 21 repeticiones.
Con el tiempo, podrás completar toda la secuencia en apenas 10-15 minutos.
La práctica diaria de los cinco ritos tibetanos puede convertirse en un ritual de equilibrio físico y mental tan potente como una meditación activa.
Descubre también nuestro artículo sobre cómo hacer una sesión de los cinco tibetanos.
Consejos finales para practicar los 5 tibetanos

- Calienta suavemente antes de comenzar.
- Si sientes mareo o tensión, reduce la velocidad.
- Mantén la mirada fija durante los giros del primer rito.
- Acompaña tu práctica con música relajante o silencio.
- Cierra con unos minutos de respiración consciente o meditación corta.
Muchos practicantes recomiendan agradecer al final de la rutina para cerrar la sesión con intención y gratitud.
Si asistes a clases de yoga en Bogotá, es muy probable aprendas que los ejercicios tibetanos son una forma ancestral y sencilla de reconectar con tu cuerpo y tu energía. Más que una rutina física, los cinco ritos representan un camino hacia el equilibrio, la calma y el bienestar.
Ya sea que los practiques como complemento de tu entrenamiento, en una clase de yoga, como una meditación activa o como tu momento de autocuidado diario, notarás sus beneficios en poco tiempo.
Recuerda: la constancia es más importante que la intensidad. Comienza con pocos movimientos, respira profundo y deja que cada rito te lleve hacia una versión más centrada, ligera y vital de ti mismo.










Excelente artículo. De hecho lo poco en práctica y evidencio sus reales beneficios. Muchísimas gracias por compartir
Hola, Alberto:
¡Nos alegra que te haya gustado el artículo!
Hace 30años los ejercitaba, todas las mañanas, luego viaje por el mundo y deje de hacerlo, aunque nunca deje los estiramientos, asi como un levantamiento liviano, de peso, junto con esa disciplinas de estiramientos, y sin ninguna excusa deje de andar una hora , (+ ó-) toda vez que siempre hay un motivo para no andar , y no debe haberlo. Un saludo. Fernando Abril Tena,
Hola Fernando,
¡Qué motivador tu testimonio! Mantener estiramientos y caminatas diarias es admirable. Retomar los Cinco Tibetanos podría darte un plus de energía y bienestar.